miércoles, 1 de junio de 2016

Calles de Salinas: Avenida Marola

La avenida Marola, antiguamente Muñoz Grandes, se inicia en la avenida de Clarín, haciendo las veces de divisoria entre ésta y la calle Luis Hauzeur, y finaliza en la calle Nicanor Piñole. Se trata de una amplia avenida residencial con construcciones unifamiliares de escasa altura. Cruzan esta avenida las calles Asturcón, Alejandro Casona, Bernardo Álvarez Galán y Dr. Fleming. Al Este de esta avenida se encuentra la parte más moderna de la Ciudad Jardín.

Posición de la avenida Marola en el plano general de Salinas (Google Earth)

Marola fue un pintor y dibujante asturiano del siglo XX. Su nombre artístico es el acrónimo de Manuel Rodríguez Lana (3/XII/1905 - 3/II/1986). Natural de Gijón, nació en el seno de una familia de cinco hermanos muy humilde, circunstancia que hará que abandone muy pronto sus estudios y se dedique a trabajar en diversas ocupaciones para colaborar económicamente con su familia. Autodidacta, sin formación artística, su pintura se podría enmarcar dentro del expresionismo y como dibujante está muy próximo al Art-decó, con un trazo vertical y limpio, que hará de su obra inconfundible y fácilmente reconocible. Su temática es muy variada y abarca casi todos los géneros: el paisaje, la pintura religiosa, el retrato, temas costumbristas, decoración escénica, el dibujo publicitario y, por supuesto, la caricatura. El contenido metafísico de su obra, especialmente sus "fantasmas", ha sido comparado por Evaristo Arce con los atormentados personajes del cineasta sueco Ingmar Bergman, impregnados de trascendencia y universalidad.

Manuel Rodríguez Lana, "Marola"

En los años veinte realiza sus primeros trabajos como ilustrador en una campaña publicitaria de la marca comercial Zarracina. A finales de esa misma década emigrará a Madrid, donde se buscará el sustento como copista en el Museo del Prado, entre otras muchas actividades relacionadas tangencialmente con el arte. A principios de los años treinta, de vuelta a Gijón, comenzará a trabajar como humorista gráfico en el diario La Prensa (1931-1936). Durante la Guerra Civil colaborará con el bando republicano realizando diversos trabajos como dibujante para C.N.T., Acracia y La Verdiasca, llegando incluso a diseñar un sello para el Consejo de Asturias y León. 


Cartel publicitario de la sidra Zarracina

Caricatura de José Valdés Prida (años 30). Refleja el estilo propio de Marola

Tras la guerra, la desaparición de la prensa tradicional de Gijón le obligará a volver a Madrid en busca de empleo. Por mediación de José Francés pasará a colaborar en la popular revista Dígame, dirigida por K-Hito. Desde entonces su vida profesional transcurrirá durante años a caballo entre Asturias y Madrid hasta que en 1952 retorne definitivamente a su tierra natal. En 1962, a los 57 años de edad, realizará su primera exposición de pintura en el Ateneo de Gijón. Tras esta primera experiencia vendrán otras en Oviedo, Gijón, Avilés y Bayona (Francia), aunque la más importante será su primera exposición en Madrid (1969), que le convertirá en uno de los artistas de moda a nivel nacional y donde alcanzará el reconocimiento como uno de los pintores asturianos más importantes del siglo XX, junto a Evaristo Valle y Nicanor Piñole.


"Mascarada en Gijón" (Marola)